ago 05

Publicado en EL DEBAT, 5 de agosto de 2010.

Este artículo señala que el énfasis en temas nacionales y identitarios en la cultura mediática y política de Cataluña está siendo utilizado por las derechas (tanto catalanas, como españolas) para ocultar el gran retraso social de nuestro país del cual son responsables. Este énfasis ignora también, los avances realizados por el gobierno tripartito desde 2003, en la corrección del enorme déficit de gasto público social que tenía y continúa teniendo Cataluña. La centralidad del tema identitario a costa del tema social está perjudicando a las izquierdas.

El tema nacional e identitario centra constantemente el debate político y mediático en Cataluña, dejando en segundo lugar el tema social. En realidad, las derechas, tanto españolas como catalanas, están acentuando deliberadamente el tema nacional. Su dominio y sus prospectos positivos electorales se basan precisamente en este hecho. A ambos lados del Ebro, se han sacado las banderas del armario para intentar centrar la atención de la ciudadanía en temas nacionales e identitarios, olvidándose de los temas que afectan directamente a la calidad de vida de las clases populares de Cataluña y de España. Ni que decir tiene que los temas nacionales e identitarios son de gran importancia. Y creo haber escrito extensamente sobre ello, defendiendo los intereses de Cataluña frente a un establishment centralista madrileño que utiliza la bandera española para defender sus propios intereses territoriales (ver mi blog www.vnavarro.org, sección política catalana). Pero el objetivo de este artículo es subrayar que las derechas catalanas están utilizando también el nacionalismo para ocultar la enorme responsabilidad que tienen en el considerable retraso del estado del bienestar catalán y que no es, como constantemente indican, el déficit fiscal de Cataluña, es decir, la diferencia entre lo que los ciudadanos en Cataluña pagan al estado central en impuestos y tasas y lo que Cataluña recibe como Comunidad Autonómica. Veamos los datos.

Se mire como se mire, Cataluña (y España) está a la cola de la Unión Europea de los Quince, el grupo de países de la UE de semejante nivel de riqueza al nuestro. El PIB per cápita en Cataluña es ya el 110% del promedio de la UE-15 (en el año 2007, último año que Eurostat, la agencia de datos de la UE, ha publicado datos para toda la UE). Y en cambio el gasto público social (que cubre el gasto en el estado del bienestar) por habitante es sólo el 73% del promedio de la UE-15. Si nos gastáramos el 110% del gasto público social promedio de la UE-15, tendríamos 20.000 millones de euros más de lo que ahora nos gastamos en escuelas, sanidad, escuelas de infancia, servicios domiciliarios, vivienda protegida, entre otros servicios.

Una consecuencia de este bajo gasto público es la escasez de personas trabajando en los servicios del estado del bienestar En realidad, y en contra de lo que las derechas están diciendo, el sector público en Cataluña es de los más pequeños de la UE-15. Sólo el 7,32% de la población adulta trabaja en el sector público (esta cifra incluye también el sector concertado), casi la mitad del promedio de la UE-15, 14% (y Suecia con un 25%). Este retraso no se debe primordialmente al déficit fiscal, el cual existe y debe corregirse (y los acuerdos tomados por el gobierno tripartido catalán con el gobierno socialista español son un buen paso en esta dirección), sino al enorme poder que las fuerzas conservadoras han tenido en la vida política y cultural de nuestro país, tal como ha ocurrido en el resto de España y en otros países del sur de Europa como Grecia y Portugal. Cataluña estuvo gobernada por cuarenta años por una dictadura (que además de ser profundamente represiva se caracterizó por su escasa sensibilidad social) y veintitrés años de gobierno de una coalición de un partido Liberal (CDC) y un partido cristiano demócrata (Unió) que no priorizaron al sector público, tanto en gasto como en empleo.

Y ahí está la causa del subdesarrollo del estado del bienestar catalán que los partidos de las derechas, tanto españolas como catalanas, están ocultando. Este bajo gasto público social determina una polarización del estado del bienestar en Cataluña, de manera que el 30-35% de la población el sector de la población de renta superior utiliza los servicios privados, y el 65-70% restante utiliza los servicios públicos, siendo el estado del bienestar catalán uno de los más polarizados por clase social en la UE-15. Este enorme retraso de gasto público social se ha ido corrigiendo por el gobierno tripartito desde el 2003, habiendo sido éste uno de los cambios más importantes (ignorados o desconocidos por los medios de información y persuasión, incluidos los medios públicos de la Generalitat, que tienen en su mayoría una orientación conservadora y neoliberal) que se han dado en Cataluña, reduciendo el enorme déficit que ésta tiene con el promedio de la UE-15.
El gasto público social por habitante subió de una manera espectacular durante el periodo 2003-2007 último año que Eurostat ha recogido datos comparables para toda la UE. De 3.781 euros en 2003 pasó a 4.806 en 2007, un crecimiento mayor que en el periodo de 1999-2003 durante el gobierno CIU, que pasó de 3.013 a 3.781. Se incrementó el gasto 257 euros por habitante lo cual es una cifra muy significativa pues ello implica muchos  millones de euros más para el estado del bienestar catalán. Consecuencia de ello, el déficit de gasto público social por habitante que Cataluña tenía con el promedio de la UE-15 bajó de 2.747 euros estandarizados (a fin de poder homologar la capacidad de compra del euros en varios países de niveles de vida distintos) en 2003 a 2.658 en 2007. Ha continuado descendiendo desde entonces.
En todas las áreas del estado del bienestar, sanidad, educación, servicios sociales, servicios domiciliarios, escuelas de infancia, entre otros, el gasto público ha crecido mucho más en los años del tripartito que durante los últimos siete años de CIU. Y de esto no se habla en los medios. Y de ahí que las izquierdas lo tienen mal para las próximas elecciones. El recurso del tema nacional en Cataluña casi siempre se ha utilizado por las derechas para ocultar el tema social.

Ver artículo en PDF

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies