oct 26

Entrevista de Tribuna Socialista al professor Vicenç Navarro, octubre de 2010

1. Hace poco hemos vivido una Huelga General en nuestro país como respuesta a la reforma laboral. ¿Considera usted que dicha reforma laboral suponga un transvase de rentas del trabajo a las rentas del capital?
– Esta reforma tiene elementos positivos pero también muchos negativos, que debilitarán a los sindicatos y por lo tanto darán mayor poder al mundo empresarial, que continuará aumentando sus rentas a costa de las rentas del trabajo, tal y como ha ido ocurriendo en los últimos 20 años.
Los sindicatos llevan toda la razón para movilizarse y anular tal reforma.

2. Los bancos, pese a las ayudas recibidas por el Gobierno de Zapatero, no hacen fluir el crédito hacia las empresas y las familias. ¿Qué debería hacer un gobierno socialdemócrata desde su punto de vista para hacer fluir el crédito?
– Lo que el gobierno socialista tendría que haber hecho era convertir las cajas de ahorros en bancos públicos, precisamente al revés de lo que se está proponiendo. Es sorprendente que un gobierno que se considere socialdemócrata esté privatizando estas cajas de ahorros, aumentando la privatización del crédito. Extender el poder de la banca cuya ineficacia ya se ha mostrado claramente, es un error. A pesar de las ayudas estatales a la banca, España es el país de la UE-15 donde es más difícil acceder al crédito.
Las ayudas que el estado ha ofrecido a la banca debieran haberse condicionado a la provisión de crédito. Es sorprendente que no se haya hecho de esta manera. Otra medida que el gobierno tendría que haber adoptado es la de nombrar a otro gobernador del Banco de España para cambiar la orientación de tal institución, que hoy funciona más como lobby bancario (defendiendo los intereses de la banca), que no como una institución pública. El gobernador actual del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, continúa indicando que la banca española es muy solvente, sin añadir, que esa solvencia se ha conseguido a base de dificultar su función pública que es la de proveer crédito. Por otra parte, tampoco es solvente como se irá viendo su enorme endeudamiento, consecuencia de su comportamiento irresponsable y especulativo en sus aventuras inmobiliarias, aventuras que el Banco de España dirigido por aquel señor, no hizo nada para prevenir.
El presidente Zapatero ha ido nombrando personas de clara sensibilidad neoliberal en puntos claves de su equipo económico. Ahí está la raíz de muchas de las políticas neoliberales que está siguiendo este equipo. Desde su eslogan inicial de que bajar impuestos es de izquierda , a sus últimas decisiones de congelar las pensiones, en lugar de recuperar el impuesto sobre el patrimonio, reflejan una orientación socioliberal que distancia al partido Socialista de su pasado y su propia historia. “Modernizarse” ha significado moverse a la derecha.

3. Encima de la mesa está la reforma de las pensiones. Algunos medios de comunicación sugieren a la población contratar un plan de pensiones privado. ¿En el futuro, qué segmento de la población cree usted que podrá hacerse un plan de pensiones privado y qué les espera a los mileuristas si las reformas siguen adelante?
– El sistema de pensiones en España es un sistema de reparto que goza de buena salud. El que está en profundo coma es el privado. La crisis financiera ha hecho tambalear todo el sistema de pensiones privadas. De ahí la desesperación de la banca y sus instrumentos intelectuales y mediáticos para hacerle ver al ciudadano que el sistema público no es viable y tienen que correr a la banca para comprar una póliza de seguro privada.
El sistema de pensiones tiene que reformarse en sentido de que sea más equitativo. Pero no en la dirección en la que se está sugiriendo. En realidad, las pensiones en España, tanto las no contributivas como las contributivas, son demasiado bajas. La financiación de la Seguridad Social tiene que aumentarse a base de aumentar la progresividad en las cotizaciones sociales. No es justo que un banquero como Botín pague lo mismo a la Seguridad Social que un empleado de su banco. Por otra parte, podrían gravarse las especulaciones financieras, creando un fondo equivalente al 1.5% del PIB, que debiera enriquecer las pensiones. Los neoliberales siempre quieren asegurarse la viabilidad de los programas sociales, reduciendo los derechos sociales. Un gobierno socialista no debe hacer esto. Lo que debe hacerse es aumentar los ingresos al estado y a la Seguridad Social , a base de mejorar la progresividad fiscal y eliminar el fraude fiscal. ¿Qué mensaje está dando el gobierno cuando se está reduciendo el apoyo a la Agencia Tributaria del estado? No hay una voluntad política por parte del equipo económico de eliminar el fraude fiscal.
Lo que se requiere es una reforma fiscal muy profunda, que garantice que España tiene los ingresos al estado comparables al resto de la Unión Europea. En España el PIB per cápita es el 94% del promedio de la Unión Europea. En cambio, el gasto público social por habitante es sólo un 72%. Ello quiere decir que nos gastamos 66.000 millones de euros menos de los que deberíamos gastar por el nivel de desarrollo económico que tenemos.  La razón de que no ocurra es porque el estado no recoge estos fondos.

4. En una entrevista radiofónica tras la Huelga General , Zapatero hizo referencia a las medidas tomadas por Schröder en Alemania como modelo de las tomadas en nuestro país. En un artículo reciente, usted ha indicado el efecto que dichas reformas provocaron en la militancia y el apoyo electoral del SPD, reduciéndose ambos drásticamente. ¿Cree usted que las medidas tomadas por el Gobierno de Zapatero en España tendrán un efecto similar para el PSOE?
– Escribí extensamente sobre este tema en PÚBLICO (07.10.10), señalando que las reformas de Schroeder tuvieron un impacto muy negativo en la economía alemana. Acentuó el modelo basado en las exportaciones en lugar de (tal como quería su Ministro de Economía, Oskar Lafontaine ) en la demanda doméstica. Consecuencia de ello es que los salarios en Alemania han estado muy retrasados, muy por detrás del aumento de la productividad. Es más, las políticas de austeridad de las propuestas Schroeder dañaron muy claramente a las clases populares.
Estas medidas tuvieron un impacto muy negativo para el partido socialdemócrata alemán. Fue causa de un enorme colapso político y que la mitad de los miembros del mayor partido socialdemócrata existente en Europa dejaran el partido. Mucho me temo que las reformas del Presidente Zapatero, mal aconsejado por sus equipos económicos, puedan producir el mismo resultado. Las encuestas ya lo están mostrando.

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